lunes, 3 de septiembre de 2012


La Riada de Rubí ( 1962-2012 )

Mi forma para colaborar con un granito de arena para recordar lo que paso este fatídico dia en mi pueblo de adopción.

 

El Pueblo:

En el año 1962 da la coincidencia de que yo nací en Andorra La Vella, pero en estos momentos mi pueblo de acogida es Rubí por esto les quería contar una historia dramática que le ocurrió a este pueblo del Vallès.

La población de Rubí creció un 40 % en la década de los 50. Lo cual provoco problemas de alojamiento, escuela, y de infraestructura sanitaria. Por esta razón hubo un crecimiento urbanístico especulativo y desordenado. Construyendo casas modestas para los emigrantes al lado de la Riera y formando así el barrio de l´Escadívol.

En rubí habían unos diez mil habitantes los cuales trabajaban tanto en la industria textil como en las viñas. Los obreros a mas mantenían unos huertos para completar la semanada.

 


El 25 de septiembre:

 
La noche de 25 de septiembre de 1962 el Vallès fue victima de una inundación que sin duda fue una de las mas devastadoras de estos últimos años en Cataluña. En esta Riada Rubí fue especialmente castigada con centenares de muertos.

Las precipitaciones fueron extraordinarias y empezaron sobre las 22 horas, el agua llego por enzima de los cinco metros de su caudal habitual. En las casas el agua llego al metro de altura, en pocos segundo se comenzaron a escuchar los gritos de auxilio. Las aguas subieron tanto que se convirtió en una autentica avalancha que se llevaba todo lo que se le presentaba delante. En su llegada al pueblo de Rubí esta se había duplicado ya que en el pueblo de Les Fonts, se juntan dos ríos. Las campanas empezaron a tocar y la gente iba gritando: El agua esta creciendo haced cuidado.

Debito a los troncos, piedras y otros escombros, al llegar al puente de la calle Cadmo, estos provocaron un embudo , las estructuras del puente cedieron y las aguas desbordaron con rabia arrasando el bario de el Escardivol y la parte baja de Can Fatjo

Llevándose por delante, fabricas, industrias y casas enteras. En medio de este tumulto se podía oír los gritos de terror y los llantos.

 

 
Al día Siguiente:

 

En la mañana del 26 de septiembre de 1962 un paisaje dantesco apareció delante de los ojos de los Rubinences. La solidaridad jugo un gran protagonismo en este día, voluntarios de todos los pueblos de alrededor llegaron para dar ayudar en las tascas de búsqueda de personas y reconstrucciones del pueblo.

Pero aquí no acaba la desgracia de Rubí, ya que esta ayuda se vio truncada por culpa de la Falange ya que quiso que todos los voluntarios vistieron la camisa azul debido a la gran cantidad de autoridades que venían a constatar el desastre ocurrido, pero el alcalde se negó.

Muchas personas se presentaron para entregar ropa, comida, y donativos. El todo se recogió en el casino de Rubí desde donde se repartieron a los damnificados.

El general Franco se desplaza asta Rubí en dos ocasiones, también vinieron el bisbe de Barcelona, los príncipes de España y representantes del Vaticano para supervisar las obras de reconstrucción y otros.

Tengo que decir que lo que ocurrió, marco toda una generación de Rubinences.

El Gobierno franquista atorgó 50 millones de pesetas para los damnificados de las victimas y 250 millones mas para la reconstrucción del pueblo. Se crearon nuevos polígonos industriales cosa que hizo que el pueblo creciera tanto de habitantes como de viviendas debido a la oferta de trabajo. En 10 años la población se duplico .

Una de las frases que se pronuncian a raíz de la riada es : En donde paso el rió no hagas el nido.

Hoy en día las malas lenguas dicen , que en días de niebla, los espíritus de los muertos vagan por todo lo largo de la Riera.

 
(La foto en blanco y negro es propiedad del archivo histórico del ayuntamiento de Rubí.)
 
Thierry Lasne Benazet
 



 

1 comentario:

  1. Estupendo post....Muy bien recordar aquel terrible suceso, ojalá se tomen medidas para que no vuelva a ocurrir en ningún otro sitio. Mi recuerdo a todas las victimas de todo el Vallés.

    Un saludo.

    Paquita

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